Así consta en un archivo secreto del programa «Sorpresa, sorpresa» en el que se indicaban coordenadas UTM la localización del inmueble en el que ocurrió la conocida escena de este programa.
Si bien aún falta precisar si es exactamente el casoplón comprado por Irene Iglesias y Pablo Montero, se puede concluir que es muy probable y casi cierto que la escena más misteriosa de la televisión en España fuera captada por las cámaras ocultas del programa «Sorpresa, sorpresa» en dicho chalé.
Lo importante es quedarse con la información y, ya puestos, a ver quién la suelta más gorda. Nosotros seguiremos indagando en lo que respecta a qué marca de mermelada usaron en aquella escena y así alargamos la noticia un par de días más.