La jornada de puertas abiertas de la semana pasada ha hecho estragos en la plantilla del museo del Prado.
La proposición de Podemos de hacer una jornada de puertas abiertas en el Prado ha ocasionado una de las mayores tragedias en la historia del museo.
El pasado día 8 de Diciembre, coincidiendo con el día de constitución y tras la insistencia de Podemos durante semanas, se llevó a cabo una jornada de puertas abiertas en el museo del Prado. Dicho día de puertas abiertas coincidió con los últimos coletazos de la borrasca Ana, la ciclogenesis explosiva que azotó la península Ibérica.
Los bedeles del museo dejaron las puertas abiertas, tanto la norte como la sur, la de Murillo, lo que hizo una corriente constante y fatal, que sumada al frío de esos días por la borrasca, ha hecho que más del 60% de la plantilla, entre los cuales hay secretarios, bedeles, taquilleros, personal de seguridad y guías cojan una gripe que les ha mantenido en cama durante varios días. Esto ha obligado a cerrar el museo durante esos días, puesto que no hay personal suficiente para garantizar la seguridad del mismo.
«Veníamos del pueblo a ver las Mininas» nos declara Antonio, vecino de Calatayud, que se ha encontrado con el museo cerrado.
«Una auténtica vergüenza, deberían abrir que no hemos venido a llevarnos ningún cuadro«, afirma Sonia M.H. vecina de Brunete, que ha aprovechado el puente para intentar acceder al museo.
«Ahora nos tocará ir al Reina Sofía y ver arte que no entendemos«, comenta José Ramón Y.P. mientras afirma que esto nos pasa por tener rojos en las instituciones y no una alcaldesa en condiciones como teníamos antes.
«Yo venía a ver el Ecce Homo y resulta que no es aquí» comenta un francés que nos ha cogido el micrófono.
