Los efectos del cambio climático son imparables y en esta ocasión le toca a una de las razas animales que más han vivido del cuento toda su vida: los lobos.
A los incesantes cambios de temperatura y los efectos devastadores que se están produciendo por la acción de fenómenos meteorológicos incontrolados y de gran virulencia, hay que añadir ahora otro desastre más para nuestra maltrecha naturaleza: los lobos están poniéndose del lado del veganismo.
La imagen es más de desalentadora y ataca nuestras ideas más firmes acerca de la fiereza de este mamífero que vive en prácticamente todos los bosques del mundo, incluyendo en el que vivía Caperucita la radical Roja.
Tal es la desesperación de los pobres animales que igual les da un sandía sin pepitas que un melón de Tomelloso pero cualquier cosa con tal de poder echarse un bocado a su maltrecha dieta afectada por el cambio climático.
Así que las futuras generaciones ya no podrán reconocer en los lobos de los cuentos clásicos como Los Siete Cabritillos, Caperucita Roja, El Lobo de Wall Street,... a aquellas fieras feroces y depredadoras que tanto han asustado a generaciones pasadas.
