¡Porque ya teníamos pocas esculturas en el horizonte!
En un giro inesperado de los acontecimientos, la Asociación de Vecinos del Barrio Salamanca ha decidido que Madrid necesita urgentemente una nueva atracción turística: una colosal escultura de Isabel Díaz Ayuso. Y no en cualquier lugar, no señor, sino justo a la entrada de la ciudad, como recibimiento digno desde nuestra querida Barcelona.
Una escultura que dejará a la Estatua de la Libertad en el olvido
Tal y como hemos sabido, esta escultura promete ser más grande y deslumbrante que cualquier otro monumento conocido hasta la fecha. «Queremos que sea una bienvenida impresionante para todos aquellos que lleguen desde Cataluña», ha comentado un vecino entusiasta, mientras observaba un boceto realizado en una servilleta de bar.
Una idea de proporciones épicas
Según fuentes consultadas, la idea es que la escultura pueda ser vista incluso desde el sistema solar, asegurando así que ningún alienígena nos pase por alto. Los más optimistas ya fantasean con ser incluidos en la lista de las Nuevas Maravillas del Mundo, entre el Coloso de Rodas y la Sagrada Familia.
Ciertas informaciones apuntan a que la estatua podría estar equipada con un sistema de luces led que proyecte mensajes de bienvenida y frases inspiradoras cada hora en punto. Algunas propuestas citan mensajes como: «¡Bienvenido a Madrid, tierra de tapas y progreso!»
La polémica está servida
Por supuesto, no podía faltar la controversia. Mientras algunos vecinos aplauden la propuesta, otros la consideran un gasto innecesario de recursos municipales. «¿Por qué no invertir ese dinero en algo más útil, como piscinas climatizadas en cada esquina?», opinan algunos críticos del proyecto.
Por lo pronto, la Asociación de Vecinos del Barrio Salamanca sigue adelante con su misión de embellecer la ciudad con lo que consideran un necesario homenaje a la presidencia que, según ellos, «ha transformado Madrid en una ciudad de renombre mundial».